Francisco ha señalado que su deber es "acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente a los más pobres, los más débiles, los más pequeños". Previamente, el Pontífice ha paseado entre la multitud en un jeep descubierto. Desde el atentado a Juan Pablo II durante un acto en la Plaza de San Pedro cuando iba en un vehículo similar, ningún otro Pontífice había paseado así.
El papa Francisco dijo que el poder del papa es el servicio a los otros, "especialmente a los más pobres, los más débiles, los más pequeños, el hambriento, el sediento, el forastero, el desnudo, el enfermo y el encarcelado".
El Pontífice ha admitido, durante la homilía de la Misa de Inicio que ser Papa "comporta también un poder" pero ante la pregunta "¿De qué poder se trata?", ha respondido, entre los aplausos de los presentes en la Plaza de San Pedro, que el Pontífice debe "acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente a los más pobres, los más débiles, los más pequeños".
"Nunca olvidemos que el verdadero poder es el servicio, y que también el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz; debe poner sus ojos en el servicio humilde, concreto, rico de fe, de san José y, como él, abrir los brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a toda la humanidad, especialmente los más pobres, los más débiles, los más pequeños", ha explicado este martes durante la homilía de la Misa de Inicio de Pontificado.
"Sólo el que sirve con amor sabe custodiar", ha puntualizado. En esta línea, ha precisado que ahí se encuentra el servicio que el Obispo de Roma debe realizar: "Custodiar a Jesús con María, custodiar toda la creación, custodiar a todos, especialmente a los más pobres". Pero también ha apuntado que es un servicio al que todos están llamados, "para hacer brillar la estrella de la esperanza".
La ceremonia fue más breve de lo acostumbrado, tal como pidió el Pontífice y ha sorprendido la llegada de Papa a la Plaza de San Pedro en un 'jeep' descubierto, en lugar del 'papamóvil', con el fin de saludar a la multitud que la abarrota para acudir a la Misa de Inicio del Ministerio del Ministerio Petrino.
Los fieles aplaudieron, vitorearon y agitaron banderas de diferentes países al paso del Pontífice, custodiado por guardaespaldas y sonriente. El Papa Francisco ha saludado con la mano y bendecido a los asistentes e, incluso, ha hecho un alto en el camino para bajar a saludar a una persona en silla de ruedas y también le han acercado niños para que los besara. Igualmente, en algún momento del recorrdio ha levantado los pulgares en señal de alegría y emoción.
En el inicio de la ceremonia, el Papa Francisco ha recibido este martes los atributos papales, el anillo del pescador y el palio, en el momento más simbólico antes de la Misa de Inicio del Ministerio Petrino.