La Fundación estima que, si no se toman medidas, las víctimas mortales relacionadas con este tipo de vehículos pueden triplicarse este año de los cinco fallecidos en 2018 hasta los 17.
Por eso urge a adoptar una regulación nacional cuanto antes y también a que los usuarios de patinetes eléctricos, monociclos, overboard o segway se informen de los riesgos y no sólo de los beneficios antes de subirse a uno.
El 96% de los españoles encuestados en el estudio de la Organización reconoce no saber nada o casi nada de la normativa al respecto, aunque seis de cada diez lo utilizaría si se llevan a cabo restricciones al tráfico en su ciudad.