Esta es la primera sesión del juicio a puerta abierta y en ella presentarán sus conclusiones las acusaciones, empezando por la fiscal, para quien ha quedado "acreditado" a lo largo del juicio que existió un delito continuado de agresión sexual en grupo, oral, vaginal y anal.
De igual forma, ha considerado probado que también concurrió un delito contra la intimidad por los vídeos que grabaron los acusados, y que todos ellos son culpables del robo del móvil de la joven porque lo conocieron y lo hicieron para dejarla "indefensa".
El ministerio público ha señalado además que los imputados no quisieron preguntar a la joven sobre su consentimiento para las relaciones sexuales cuando pudieron hacerlo, por lo que les ha advertido de que "la ignorancia deliberada" tiene sus consecuencias.