La estudiante comenzó sus prácticas el pasado lunes 7 de abril y, desde su primer día, quedó impactada por el comportamiento de dos de las cuidadoras hacia los menores. Según su declaración ante la policía, la joven observó repetidas situaciones de trato vejatorio y humillante hacia los niños. Contó que los pequeños entraban al comedor llorando, se abrazaban a ella y se negaban a comer. De hecho, en una ocasión, presenció cómo a un niño se le cayó la comida al suelo y una de las cuidadoras le dijo que si no se la comía sucia, no comería más. “Amenazó con darle la comida sucia a los demás. Todo el mundo lo veía, pero nadie decía nada”, declaró.
El vídeo que grabó la joven
Al ver que el resto del personal no intervenía, decidió grabar con su móvil a una de las cuidadoras en plena acción. En un vídeo de tres minutos y medio, se ve cómo Raquel, una de las trabajadoras, zarandea a una niña, empuja su cabeza contra la pared y le grita mientras intenta alimentarla.
Ella le mostró el vídeo a su madre, quien inmediatamente contactó con los padres de la niña agredida. Estos acudieron a la comisaría para denunciar los hechos. Y tras la denuncia, el jueves por la noche fue despedida y posteriormente detenida. Al día siguiente, la Policía arrestó a otras dos trabajadoras y a la directora del centro. El viernes, tras declarar ante el juzgado número 3 de Torrejón de Ardoz, las cuatro quedaron en libertad con medidas cautelares, incluida la prohibición de trabajar con menores mientras se instruye el caso.
Su declaración ante el juez
Raquel, de 45 años, admitió ante el juez que “quizá se pasó un poco”, aunque aseguró que era la primera vez que actuaba así. Alegó que la presión de los padres por la falta de apetito de los niños le llevó a perder los nervios. Por su parte, la directora de la guardería afirmó que nunca presenció comportamientos agresivos por parte de su equipo, ya que durante la hora de la comida se encontraba ensayando canciones con los niños mayores.
Hasta el momento, solo dos familias han presentado denuncia formal, aunque se espera que más padres acudan a la Policía en los próximos días. El Ayuntamiento de Torrejón, municipio de más de 140.000 habitantes, anunció que facilitará alternativas educativas para las familias afectadas, después de que la escuela permaneciera cerrada el pasado viernes.
Este caso ha generado gran conmoción entre los vecinos y ha vuelto a poner sobre la mesa la importancia de la vigilancia y control en centros de atención infantil.
