El incidente tuvo lugar este fin de semana, mientras el agente fuera de servicio disfrutaba junto a su familia de una carrera infantil.
En el parque en el que se encontraba, había un hombre que llevaba un perro potencialmente peligroso suelto y sin bozal, lo que suponía un "peligro manifiesto" para los menores, ha indicado el sindicato.
El agente, a instancia de los vecinos, que conocen su condición de Policía, se acercó al hombre y le instó a que sujetase el perro y le pusiese el correspondiente bozal. Como respuesta recibió "insultos y amenazas".
Ante ello, el agente le indicó que iba a dar aviso a la Sala, y recibió varios cadenazos y golpes por parte del individuo, al cual se unió uno de sus amigos. A causa de los golpes, el policía precisó de varios puntos de sutura y el presunto agresor fue detenido por los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de Policía Local.
La agresión se produjo en presencia de las hijas menores de edad del policía, las cuales "están asustadas, atemorizadas y traumatizadas por lo ocurrido", puesto que el detenido vive en el mismo barrio.
El SIPOL-CV ya se ha reunido con el agente y su familia y se personará como acusación particular en este proceso.