Elio Hernández y su hija María de Los Ángeles permanecían desaparecidos desde el pasado domingo 8 de mayo después de que, según informa su familia, ambos se dirigieran a un centro de salud después de que la hija sufriera una crisis de ansiedad. Sin embargo, las alarmas saltaron porque se perdió su rastro y ninguno había ingresado en ningún centro hospitalario o de salud de Tenerife.
Su rastro se había perdido en Radazul, en el municipio de El Rosario en Tenerife. Este miércoles se ha confirmado la peor de las noticias al encontrar ambos cuerpos sin vida. Los dos iban a bordo de su vehículo, un Toyota color granate.
La asociación SOS Desaparecidos mandaba una alerta tras las 48 horas de su desacparición y un día después se confirma el peor final. Las labores de búsqueda han conseguido localizas a ambos en un acantilado de 600 metros en la zona de Varadero, de difícil acceso. En ese punto encontraron también el vehículo en el que viajaban.
El juez ha autorizado el levantamiento de los cuerpos que han sido trasladados al instituto anatómico forense para identificar los cuerpos y practicar las pertinentes autopsias para determinar la causa de la muerte.