Con la voz quebradas y con los ojos vidriosos el Presidente de la Xunta de Galicia comparecía tras un Consejo de Gobierno Extraordinario en el que se ha acordado decretar siete días de luto "el luto más grande" anunciado nunca en Galicia.
[[DEST:"El 24 de Julio deja de ser víspera de una celebración, para conmemorar una tragedia"]]
Feijóo ha querido agradecer a todo el pueblo gallego su comportamiento, una ciudadanía al que ha calificado como "un pueblo comprometido, solidario y ejemplar" agradeciendo a todas las personas que colapsaron los servicios de donación de sangre y que desde el primer momento "se arrojaron a las vías del tren sin reparar en más peligros que los que estában sufriendo los demás".
De luto riguroso el Núñez Feijóo ha declarado sentirse "orgulloso como presidente y como gallego" de todos los trabajos realizados por los servicios sanitarios de la Comunidad y ha afirmado que "las tragedias imprimen carácter en los pueblos y otorgan valor a su gente".
Desde la Xunta de Galicia se irá informando a lo largo de toda la jornada de hoy y de este viernes de los procedimientos que se van a seguir. Feijóo ha cifrado en 77 los muertos de este accidente ferroviario ocurrido en Santiago de Compostela, aunque al mismo tiempo el Delegado del Gobierno gallego elevaba a 78 los fallecidos. Por eso, de forma prudente el mandatario gallego ha pedido que se espere al balance de las autoridades judiciales.
En el momento más emotivo de su intervención, Feijóo ha asegurado que se ha tratado de un "tren que se llevó por delante la vida y los sueños de tantas personas" y por ello ha añadido "el 24 de julio ya no será la víspera de una celebración, sino la conmemoración de una tragedia".