Se amplía al mar la búsqueda del niño

Encuentran una mochila que podría ser del niño desaparecido en las inundaciones de Mallorca

El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil ha encontrado una mochila en cala Morlanda, al sur de s'Illot, donde se está buscando al niño desaparecido en las inundaciones que se produjeron el martes 9 en la zona del Llevant de Mallorca.

ondacero.es

Madrid | 13.10.2018 14:57

Especialistas de la Unidad Militar de Emergencias, la Guardia Civil y Bomberos de Mallorca
Especialistas de la Unidad Militar de Emergencias, la Guardia Civil y Bomberos de Mallorca | EFE

Según han explicado, ha sido un particular el que la ha encontrado y, posteriormente, se la ha entregado a efectivos de los GEAS que estaban investigando en la zona en busca de pistas del niño.

Cabe recordar que este jueves ya se encontraron efectos personales que podrían ser suyos.

El menor viajaba con su madre y con su hermana a bordo de un coche cuando fueron alcanzados por la riada. La mujer consiguió sacar a la niña del vehículo, pero después el coche fue arrastrado por la corriente. El cuerpo de la madre fue encontrado en el interior del coche.

La búsqueda del niño se ha ampliado hoy al mar, en la zona de la desembocadura del torrente de Ses Planes, además de en distintos puntos en unos doce kilómetros del cauce.

La consellera de Hacienda y Administraciones Públicas, Catalina Cladera, ha detallado que embarcaciones de la Unidad Militar de Emergencias (UME), la Guardia Civil y Salvamento Marítimo rastrean el área marina frente a S'Illot hasta siete millas mar adentro.

Fuentes de la Guardia Civil han explicado cómo se desarrolló el suceso en el que perdió la vida la madre del niño desaparecido, nacido en 2012. La mujer circulaba bajo la tormenta desde Manacor hacia Capdepera y se desvió para entrar a Sant Llorenç ante la intensidad de las lluvias, al entrar al pueblo le sorprendió una gran avenida de agua procedente de la parte alta del núcleo.

Según los investigadores, el agua debió comenzar a inundar y arrastrar el coche, y la mujer, junto con su hija de 8 años y el niño de 6, bajó del vehículo. La fuerza del caudal les arrastró a los tres.

La niña fue rescatada con vida del agua varios cientos de metros más adelante por un alemán que circulaba en bicicleta, el cadáver de la mujer fue hallado en torno a un kilómetro más adelante al día siguiente, y el niño sigue desaparecido y centra ahora toda el dispositivo de búsqueda.

En esta operación, así como en las que se siguen desarrollando en tierra, participan hoy unos 200 efectivos de diferentes organismos, un tercio de los 600 que este sábado siguen desplegados en la comarca del Levante de Mallorca.

Cladera, que ha destacado el "gran avance en la limpieza" de Sant Llorenç logrado ayer gracias al trabajo de más de un millar de voluntarios, ha indicado que ha comenzado "la fase de reconstrucción", con la intervención de fontaneros, electricistas, carpinteros, etcétera.

En este sentido, ha hecho un llamamiento a la solidaridad de profesionales de la construcción que puedan contribuir a realizar reparaciones en las casas que han sufrido mayores daños.

También ha recordado que el Ayuntamiento de Sant Llorenç ha abierto dos cuentas corrientes para recoger aportaciones económicas en las que se han recaudado hasta hoy 175.000 euros.

Hoy, ha explicado la consellera, 400 voluntarios continúan apoyando los trabajos de limpieza tanto en Sant Llorenç como en otros núcleos afectados como S'Illot, Son Carrió y Canyamel, mientras que 13 trabajadores sociales prosiguen la visita a las viviendas afectadas para iniciar el proceso de evaluación de daños y atender necesidades urgentes.

El Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat) tiene a 63 agentes realizando tareas de limpieza en la zona de Canyamel, una de las que más tarde comenzaron a rehabilitarse.

El centro de salud de Sant Llorenç estará abierto todo el fin de semana atendido por dos médicos y dos enfermeros, y todos los colegios de la comarca volverán a abrir el próximo lunes, reforzados con asistencia psicológica para ayudar a niños que pudieran tener secuelas por la catástrofe.