Según ha informado hoy la Dirección General de la Policía en una nota de prensa, la detención ha sido posible gracias a la denuncia de una joven que descubrió al detenido cuando se disponía a realizar sus necesidades en una zona de maleza situada junto al recinto ferial La Peraleda, en Toledo.
La chica se percató de la existencia de una luz roja y cuando se acercó hasta el lugar del que procedía, descubrió una zona preparada con cartones para que una persona pudiera apostarse entre las hierbas.
También divisó a un joven alejarse del lugar a la carrera e hizo una llamada de aviso al 091, lo que permitió que varios coches radiopatrullas dieran una batida por la zona y localizaran al presunto autor de los hechos que fue interceptado cuando se disponía a huir del lugar a bordo de un turismo.
En el interior del turismo, los agentes encontraron una cámara réflex y una videocámara equipada con luz infrarroja en la que había almacenados 34 vídeos, todos ellos de esa misma noche.
Posteriormente, se hizo un registro en el domicilio del detenido, en el que fueron localizados cerca de 1.000 archivos de vídeo de similares características, que habían sido realizados a lo largo de varios años en diferentes provincias del territorio nacional, tanto de día como de noche.
Además de los archivos de vídeo, también fue intervenida una silla de camuflaje que presuntamente habría utilizado para ocultarse y pasar desapercibido durante algunas de las filmaciones.
La Policía Nacional procedió a la detención de este joven, del que no se han facilitado más datos, como presunto autor de un delito continuado de descubrimiento y revelación de secretos.
El detenido, que es de nacionalidad española y residente en la provincia de Toledo, carecía de antecedentes policiales hasta la fecha.
