PREVISIÓN DEL TIEMPO

La AEMET desvela qué días lloverá en Semana Santa

Millones de españoles ya han reservado sus vacaciones de Semana Santa con la vista puesta en el cielo a la espera de no encontrarse por sorpresa con las temidas precipitaciones.

🚗 Llega la Operación Salida de Semana Santa 2023: la lista de radares de la DGT en las carreteras de España

Dónde hará buen tiempo en Semana Santa: la AEMET actualiza su predicción "especial"

M.P. | Agencias

Madrid | 01.04.2023 06:04

La AEMET desvela qué días lloverá en Semana Santa
Imagen de archivo de una mujer paseando bajo la lluvia | Pexels

La Operación Salida de Semana Santa ya ha comenzado. Según estima la DGT, 16 millones de españoles se desplazarán desde este viernes 31 de marzo hasta el próximo lunes 10 de abril con destino a sus vacaciones, las más esperadas tras las ya lejanas de Navidad.

El dispositivo diseñado por la DGT se puso en marcha ayer Viernes de Dolores y concluirá el próximo Lunes de Pascua, festivo en Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, La Rioja, Navarra y País Vasco. Recuerda Tráfico que este periodo vacacional es uno de los más complicados del año, al aumentar el volumen de desplazamientos en un corto espacio de tiempo, con orígenes y destinos similares los mismos días y horas.

Pero las carreteras no serán el único lugar en el que los españoles pondrán su atención. Ya desde hace varios días, millones de personas están pendientes de la previsión meteorológica para saber qué tiempo les hará en sus zonas de destino.

Por eso, la AEMET ya publicó este miércoles su predicción meteorológica para los días de Semana Santa, que podría ir variando a medida que avanzasen los días. Este viernes, su portavoz Rubén del Campo ha dado una previsión más exacta de lo que nos espera estos días.

El tiempo en Semana Santa: qué días lloverá

Frente a los altos valores de estos días, la Semana Santa empezará con temperaturas más bajas, acordes a la época del año, para dar paso a jornadas estables, sin descartarse lluvia a partir del Viernes Santo, sobre todo en el suroeste peninsular por el acercamiento de una borrasca atlántica.

Aunque este fin de semana el tiempo se prevé fresco y variable, del Lunes al Jueves Santo la estabilidad atmosférica estaría más asegurada, con días tranquilos, sin apenas lluvias y temperaturas al alza, pese al frío nocturno, lo que propiciará un "marcado contraste térmico" entre el día y la noche.

Mientras el viernes los termómetros registraban temperaturas elevadas en algunos puntos del país (Sevilla 29º; Zaragoza 27º; Tarragona y Jaén 26º), el sábado, con el giro de los vientos hacia el noroeste, se prevé una "bajada térmica notable" en el Valle del Ebro, costa Mediterránea y Baleares, además de lluvias en Galicia, Cantábrico y área pirenaica, y una cota de nieve en el norte peninsular cercana a 1.000 metros, con "acumulaciones de nieve significativas en el Pirineo". También podrán desarrollarse "algunos chaparrones más aislados y dispersos en el resto del norte y en puntos del centro de la Península, así como en Baleares".

No se descarta lluvia a partir del Viernes Santo

El domingo volverán a descender las temperaturas, más acusado en el este peninsular y en las Baleares, e incluso con heladas nocturnas en puntos de montaña, zonas aisladas de la meseta y páramos del centro.

El Lunes Santo comenzará sin apenas precipitaciones, salvo en el extremo norte y Baleares, aunque la presencia de vientos fríos hará que esa madrugada se formen heladas en zonas montañosas y puntos de la meseta norte y páramos del centro; en Ávila se bajará hasta 1 grado bajo cero.

El martes y el miércoles el ambiente seguirá muy estable en casi todo el país, con heladas nocturnas en puntos de la meseta norte, centro y zonas de montaña, y valores diurnos que superarán los 18-20 grados en amplias zonas del territorio y los 25 grados en el sur y 28-30 grados de nuevo en el Valle del Guadalquivir.

El Jueves Santo el ambiente seguirá estacionario, con valores al alza, pero es posible que para el Viernes Santo y días posteriores las altas presiones se retiren al norte de Europa, para dar paso a bajas presiones atlánticas que favorecerían chubascos, en el suroeste peninsular.