Este miércoles se agotaba el plazo para que las distintas Comunidades Autónomas presentaran sus propuestas para terminar de perfilar el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo que quiere sacar adelante el Ministerio de Sanidad. La mayor parte de consejerías autonómicas han presentado ya sus propuestas, si bien algunas como las de Andalucía, Navarra o Asturias están apurando el plazo hasta el límite.
La búsqueda de un consenso por la salud
Mientras que algunas comunidades como Asturias y Cataluña apuestan por la prohibición de fumar en terrazas, otras como Aragón y Baleares se inclinan por la promoción de incentivos fiscales para los locales que impulsen medidas anti-tabaco, así como la promoción de distintivos de calidad para los negocios que se adhieran a estas políticas.
Mónica García, ministra de Sanidad, apremia a que las regiones alcancen un "consenso" para lograr un "país sin humo", si bien parece que existe un sentir general sobre la necesidad de combatir el tabaquismo, sobre todo entre los más jóvenes. Aunque el plazo para las aportaciones finalizaba este miércoles, el Plan Integral será elaborado durante una reunión monográfica que tendrá lugar el próximo 3 de abril. Entonces, se determinará si la política nacional se inclinará hacia la prohibición o hacia la promoción de incentivos.
Comunidades en contra de las prohibiciones
La consejería de Salud de Baleares, dirigida por Manuela García Romero, se muestra proclive a ofrecer incentivos fiscales a los locales que restrinjan el consumo de tabaco, así como la expedición de distintivos de "Espacios sin Humo" en los comercios y locales de hostelería que trabajen en esta línea.
El gobierno insular, por otro lado, solicita la inclusión de una memoria económica que acompañe al Plan Integral, así como una dotación presupuestaria que pueda permitir la contratación de inspectores y costear la formación de nuevos expertos. Para cubrir estos y otras inversiones en la lucha contra el tabaquismo, la consejería balear propone invertir los beneficios derivados del aumento del precio de las cajetillas que el Gobierno implementó el pasado mes de enero.
Aragón y La Rioja se posicionan en la misma línea: incentivos en lugar de prohibición y presupuesto para acometer este plan. Desde el Gobierno aragonés, sin embargo, señalan la necesidad de impulsar estudios para valorar los efectos del vapeo y su posible potencial como método de deshabituación tabáquica, así como otras investigaciones para conocer mejor los efectos del consumo de tabaco y cannabis.
La administración de La Rioja pide al Ministerio más concreción en el Plan, pues considera que no se detalla suficiente como será la regulación del consumo de tabaco en espacios sin humo y cómo se controla que se cumplan las restricciones en espacios sanitarios o escolares. En esa línea, Castilla y León también solicita que se especifique qué autoridades son las responsables de controlar el cumplimiento de la normativa, que el gabinete castellanoleonés busca que conjugue el derecho a la salud y la libertad individual.
Murcia y Galicia han señalado la importancia del consenso a la hora de elaborar este plan: la región gallega, en concreto, ya ha impulsado campañas como 'Playas sin humo' o 'Parques sin humo', y en la misma línea apuesta por la autorregulación de los espacios libres de humo y la vigilancia de la administración en los lugares pertinentes.
Fumar en terrazas: en el punto de mira
Mientras que muchos de los territorios apuntan a la autorregulación y el incentivo, algunas otras comunidades plantean la prohibición como una solución efectiva para prevenir contra el tabaquismo: Andalucía plantea, por ejemplo, prohibir la venta de vapeadores a menores de edad, y Asturias se ha mostrado siempre de acuerdo con la prohibición de fumar en las terrazas, a pesar de que pueda despertar críticas entre el sector hosteleros.
Cataluña se ha mostrado a favor de implementar políticas para la prevención del consumo de tabaco, si tienen incidencia en el precio de la cajetilla y si se incluye el empaquetado neutro del tabaco en el Plan Integral: desde Cataluña, defienden también la inclusión de fondos finalistas para financiar las iniciativas antitabaco. El consejero de Salud Manel Balcells ya se ha manifestado a favor de restringir el consumo de tabaco en marquesinas de transporte público, terrazas o dentro de los vehículos en los que viajen niños o mujeres embarazadas.
Extremadura se pronunciará con claridad tras el consejo interterritorial, pues a pesar de defender la creación de espacios sin humo muestra preocupación por las familias que se dedican a la plantación de tabaco. La Comunidad de Madrid tampoco ha presentado aún sus alegatos, si bien ha indicado la necesidad de "reforzar las actuaciones en materia de control y prevención del tabaquismo" y ha señalado al Estado como responsable de implementar estas medidas a nivel nacional.
El consejero de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Marciano Gómez, ha detallado que la propuesta de su departamento se "basará esencialmente en que el tabaco perjudica a la salud, pero también habrá que dejar ciertos espacios de libertad".