Un coche bomba ha explotado cerca de una clínica de fertilidad en Palm Springs (California). Ha muerto una persona y otras cinco han resultado heridas. El suceso se produjo a las 11:00 horas del sábado (hora local, 18:00 horas GMT) y la bomba expansiva también provocó daños al establecimiento y a edificios de los alrededores.
El FBI se ha hecho cargo de la investigación y ha calificado los hechos como "un acto internacional de terrorismo". Además, la policía local ha informado de que la explosión fue tan fuerte que se sintió a varios kilómetros de distancia. Se cree que la clínica de fertilidad American Reproductive era el objetivo del ataque.
Desde el primer momento, tal y como explicó el jefe del Departamento de Bomberos, Paul Alvarado, la explosión parecía "un acto de violencia intencional". Por su parte, el canal ABC 7 ha confirmado que el fallecido es el sospechoso del ataque, aunque el director adjunto de la oficina del FBI de Los Angeles, Akil Davis, no lo aseguró en una rueda de prensa posterior.
En cuanto al alcalde de Palm Springs, Ron DeHarte confirmó a través de un mensaje al medio Los Angeles Times que se había utilizado un coche bomba para el ataque. Por otro lado, la clínica, a través de un comunicado en redes sociales, informó de que ningún trabajador había resultado herido.
El autor quería emitir el atentado en directo
Tras investigar el lugar de los hechos, los medios locales han indicado que las autoridades encontraron un trípode cercano al lugar de la explosión, lo que podría indicar que el autor de los hechos quería transmitirlo en directo.
Aunque las autoridades no han desvelado la identidad del presunto autor de los hechos, tal y como explica El País, según versiones extraoficiales se trataría de un hombre de 25 años que habría dejado una grabación de audio de media hora de duración en el que se define como "pro mortalidad". "Estoy molesto por existir, yo no di mi consentimiento a nadie para venir a este mundo" dice la grabación.
Se investiga como acto terrorista
El FBI ha confirmado en un comunicado que el hecho está investigando como "un acto intencionado de terrorismo". Por su parte, el Centro Nacional de Derechos de las Mujeres, también en un comunicado, atribuyó el acto de violencia a "la retórica de odio de la Administración Trump" dirigida a personas que buscan y proveen servicios de salud reproductivos, y aseguró que hay un aumento de ataques al acceso a tratamientos de fertilidad.
La clínica realiza tratamientos de fecundación in vitro y fueron un punto de la campaña electoral del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que prometió más protección para acceder a este tratamiento y reducir los precios.