El expresidente francés Nicolas Sarkozy ha salido de su casa para dirigirse a la prisión parisiense de La Santé, donde va a ingresar por la pena de cinco años impuesta hace casi un mes por la financiación de la campaña electoral que le llevó al Elíseo en 2007 con dinero del régimen libio de Muamar Gadafi.
Sarkozy salió sobre las 9.10 horas locales de la mano de su mujer, Carla Bruni, y en compañía de sus hijos y sus hermanos de su domicilio situado en el distrito XVI de París, donde un centenar de personas se congregaron en nuestra de apoyo del exjefe de Estado, para después subir a un coche para ir a la prisión parisiense, en el distrito XIV.
Sus abogados van a pedir su "puesta en libertad"
Los abogados de Sarkozy, que se convertirá en el primer expresidente en la historia de la República francesa y de la Unión Europea que ingresa en la cárcel, han anunciado que van a presentar una petición de puesta en libertad "muy rápidamente".
Su encarcelamiento "refuerza su determinación y su rabia para demostrar que es inocente", ha dicho hoy a la televisión BFMTV Christophe Ingrain, uno de sus abogados.
"Objetivamente no hay ninguna razón para que el tribunal de apelación rechace esta liberación, pero existe incertidumbre jurídica y la afrontaremos", ha señalado el letrado, quien ha adelantado que "no habrá trato preferencial" para él y que "su solicitud se examinará dentro del plazo habitual, que es de un mes".
En cualquier caso, el letrado ha añadido que Sarkozy pasará "entre tres semanas y un mes detenido antes de que se pronuncie el tribunal" sobre su demanda de puesta en libertad, que de recibir una respuesta positiva le permitiría pasar las Navidades en su casa y comparecer libre en el juicio en apelación previsto para marzo de 2026.
Pretende escribir sobre su experiencia
Durante el tiempo que pasará en La Santé, el exjefe de Estado tiene previsto aprovechar para "escribir sobre su experiencia, sobre la injusticia de la que es víctima".
Su hijo agradece el apoyo de los franceses a su padre
"Quiero agradecer de todo corazón a los innumerables franceses que, a pesar de sus obligaciones, se pusieron de pie para estar con nosotros esta mañana. Mi padre comienza a pasar por esta dura prueba armado con vuestra lealtad y tu amor", así ha agradecido Louis Sarkozy el apoyo manifestado a su padre en el momento de su detención para dirigirse a la prisión parisina de La Santé.
Además, ha asegurado que su padre es "un hombre inocente" y que no representa una amenaza para nadie. Ha aprovechado para denunciar que su padre va a estar sumido en un cautiverio incomprensible e injusto.

