Su pareja descubrió al atacante, avisó a la mujer de que se escondiera, pero no pudo evitar que disparara con la ballesta. La flecha se le clavó a la mujer en el corazón, pero no le dio al bebé. De forma, que fue trasladada de inmediato al hospital, ya fallecida, se le practicó una cesárea de urgencia y ha podido nacer este bebé de ocho meses de gestación, según publica el diario 'The guardian'.