Quince de los fallecidos perdieron la vida en la zona de Al Karama y sus alrededores, en el este de la provincia nororiental de Al Raqa -feudo principal del Estado Islámico en Siria-; mientras que los otros cuatro perecieron por los ataques aéreos en la localidad monumental de Palmira y sus inmediaciones, en Homs (centro).
Según la ONG, las fuerza aérea rusa ha efectuado un total de 34 bombardeos en las áreas de Al Karama y Palmira, donde también ha destruido dos depósitos de armas de los extremistas y doce vehículos.
Rusia inició el pasado 30 de septiembre los ataques aéreos en el territorio sirio para combatir al Estado Islámico, según anunciaron fuentes oficiales rusas y sirias.
Sin embargo, aparte de blancos del EI, activistas y opositores sirios han denunciado que también ha atacado objetivos civiles y bases de organizaciones rebeldes contrarias al régimen de Bachar al Asad.
El EI proclamó a finales de junio de 2014 un califato en Siria e Irak, donde ha tomado partes del norte y el centro de ambos países.