El Gobierno de Israel ha negado este domingo que haya realizado ningún tipo de maltrato sobre los miembros de la Global Sumud Flotilla que se encuentran detenidos en su territorio. Estas declaraciones se han producido después de que algunos de los activistas hayan denunciado la violación de sus derechos, así como agresiones.
Uno de los casos más sonados es el de Greta Thunberg. Según un correo remitido por el Ministerio de Exteriores sueco a personas cercanas a la activista al que ha tenido acceso 'The Guardian', esta habría denunciado que las autoridades israelíes la habían encerrado en una celda llena de chinches, así como que se encontraba en estado de deshidratación y casi de inanición.
Por otra parte, otro de los tripulantes de la Flotilla, ErsinCelik ha expresado que los soldados israelíes "arrastraron a la pequeña Greta del pelo ante nuestros ojos", así como "la golpearon y obligaron a besar la bandera israelí".
Por su parte, el Ministerio de Exteriores israelí ha publicado un comunicado en su cuenta de la red social X en el que ha calificado estas acusaciones de "mentidas descaradas" y ha asegurado que "todos los derechos legales de los detenidos están siendo respetados en su total integridad". "Greta tampoco se quejó a las autoridades israelíes de ninguna de estas acusaciones ridículas y sin fundamento, porque nunca ocurrieron", ha concluido.

