Andrea Grinage, una mujer de 31 años de Maryland, ha tenido que dar a luz cuando estaba embarazada de siete meses después de que su novio la quemase.
La joven sufrió severas quemaduras tras ser rociada con gasolina en la bañera de su casa a las afueras de Washington. Tras el incidente, fue tasladada al hospital, donde dio a luz a una niña. Tanto la madre como el bebé se encuentran en estado crítico pero evolucionan favorablemente.
Pese a su estado, Grinage pudo contarle a la Policía lo que había ocurrido y quién era el responsable y advirtió a su madre de que su novio iba de camino a su casa para hacerle daño también, pero no lo consiguió porque fue arrestado antes.
"Fue muy valiente", aseguró la portavoz de la Policía del condado, Jennifer Doneland, que quiso trasladar a la familia de la joven "lo valiente que ha sido" pues pese a su estado, no dejó de preocuparse por su hija y no dudó en ayudar a los agentes para que lograran dar con el agresor, según indica el medio 'Fox News'.
Según ha indicado el padre de la joven, su novio le atacó porque "no quería ser padre".
La familia de la herida ha abierto una petición en la página 'Go Fund Me' para que quien quiera pueda colaborar económicamente. "Todo se perdió en el incendio y ella debe comenzar de nuevo con tu ayuda, Tiene un largo camino hasta la recuperación y un coste médico que desconocemos. Por favor, ayude a parar la violencia doméstica", señalan sus familiares.