El millonario George Soros ha delegado a sus 92 años la gestión de su imperio empresarial y legado político a su hijo, Alexander Soros, que a sus 37 años se hace con el control de una fortuna valorada en 25.000 millones de dólares.
Así lo ha confirmado el propio Alexander Soros en una entrevista en 'The Wall Street Journal', en la que ha afirmado que "yo soy más político", lo que ha puesto en alerta a los medios más conservadores de Estados Unidos que han comenzado a advertir de sus intenciones de influir en la política nacional e internacional.
Soros hijo ha expresado su preocupación por la intención de Donald Trump de volver a presentarse a las elecciones presidenciales del próximo año. Sobre su implicación en la campaña, Alex Soros ha explicado que "por mucho que me hubiese encantado sacar el dinero dela política, si la otra parte lo hace también lo tendremos que hacer nosotros".
Además, ha emplazado a los demócratas a ser más claros con su mensaje, "más patrióticos e incluyentes" para conseguir el apoyo de los votantes. "Solo por que alguien vote a Trump no significa que esté perdido o sea racista", ha explicado a la vez que manifestaba su intención de ayudar al Partido Demócrata para mejorar los resultados entre los votantes latinoamericanos y negros.
Soros se ha reunido en varias ocasiones con altos cargos de la Administración Biden, como la vicepresidenta Kamala Harris o el portavoz demócrata en el Senado, Chuk Schumer, así como dirigentes internacionales como Lula da Silva o Justin Trudeau.