Las autoridades de la localidad china de Wuhan, epicentro del coronavirus que se ha saldado por el momento con 17 muertos en el país, han anunciado el cierre del transporte público como medida de contención de la enfermedad.
Asimismo, el Gobierno ha pedido a aquellos que viven en la ciudad que no abandonen la zona y ha informado de que las estaciones de tren y el aeropuerto permanecerán cerrados.
"Básicamente, no vayan a Wuhan. Y que todos aquellos que están allí no abandonen la ciudad", ha indicado el viceministro de Sanidad, Li Bin, que ha afirmado de que hay pruebas de que la enfermedad "se transmite principalmente por el tracto respiratorio".
Los servicios de autobús, metro, ferry y cercanías se verán suspendidos desde las 10.00 de la mañana (hora local) de este jueves, 23 de enero, tal y como ha indicado la cadena de televisión BBC.
En este sentido, las autoridades han ordenado a todas las agencias de viaje que suspendan los tours turísticos en la ciudad entre los días 22 de enero y 8 de febrero debido a la emergencia sanitaria, que se encuentra en nivel II.
El Departamento de Cultura y Turismo ha pedido, además, que se cancelen las actividades en los principales monumentos turísticos y hoteles más importantes de la ciudad.
Diversas ciudades de la región, como Bangkok, Hong Kong, Seúl o Sídney, están aumentado las medidas de precaución contra el virus, que ya afecta a más de 500 personas en China. Así, han introducido análisis obligatorios en las terminales de llegada de los aeropuertos donde podría producirse un mayor indicio de la enfermedad.
Un equipo de expertos de la Comisión Nacional de Salud de China ha confirmado la transmisión de persona a persona del coronavirus, que posee un posible origen zoonótico, y el contagio de personal médico.