El líder de Vox, Santiago Abascal, ha anunciado este jueves la ruptura de los pactos de gobierno que comparten en Extremadura, Baleares, Castilla y León, Aragón, la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana con el Partido Popular.
Una decisión que ha comunicado tras pasar varias horas reunido en el Comité Ejecutivo Nacional de su formación.
Durante la comparecencia, Abascal ha acusado a Alberto Núñez Feijóo de "estafar a sus electores" y asegura que ellos no tienen "apego a los sillones", sino a sus principios.
En Vox atribuyen la retirada del apoyo parlamentario a una decisión "unilateral" del PP y de su presidente tras aceptar el reparto de menores migrantes no acompañados.
Nadie nos ha votado para que continúe la invasión de inmigración ilegal y de menas
Los vicepresidentes de las cinco autonomías anunciarán próximamente su dimisión y Vox pasará a la oposición.
Acusa a Feijóo de obligar a los presidentes autonómicos a pactar con Sánchez
Santiago Abascal culpa a Núñez Feijóo de impedir los acuerdos con Vox en las regiones, mientras que ayer "obligó a sus presidentes autonómicos a pactar con Sánchez un nuevo reparto de menas ilegales".
El PP, ha dicho Abascal, se reparte "los jueces, los puestos en Europa, las Comisiones del Congreso de los Diputados y el Senado" con un gobierno al que ha calificado como "corrupto".
Sobre Pedro Sánchez, ha indicado que es la persona que siembra "división y miseria" en España y le considera un "autócrata que tiene a su familia en el banquillo por robar".
Según la propuesta del Ejecutivo, las autonomías en las que PP y Vox gobiernan en coalición acogerían un total de 110 menores migrantes: Aragón, 20; Castilla y León, 21 menores; Comunidad Valenciana, 23; Extremadura, 30; y Murcia, 30. Baleares acogería diez.
Los dirigentes de Vox llevaban días avisando al PP de que darían por rotos los ejecutivos autonómicos si aceptaban esta distribución, alegando que los pactos suscritos abogan por políticas antiinmigración.
Mazón apuesta por gobernar en minoría en la Comunidad Valenciana
Algunos presidentes autonómicos del PP ya se pronunciaban antes de conocer la decisión. Era el caso del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, que defendió este jueves que su partido está "en lo que le interesa a la gente" y "no en los juegos de sillones".
Preguntado por si descarta unas elecciones anticipadas, rehusó contestar directamente a la cuestión, pero sí mostró su predisposición a gobernar en minoría parlamentaria.
"Si esa pregunta fuera que es lo que creo que le conviene a la Comunidad Valenciana, es seguir trabajando en esta agenda del cambio. Creo que es lo mejor para nuestra sociedad. Estoy convencido de esto y voy a hacer todo lo posible para que siga siendo así", aseveró.
Por último, sobre si ya ha pensado en los perfiles que pueden sustituir a los consejeros de Vox, avisó de que él no tiene que dar ninguna "noticia". E insistió en que está en "las cosas importantes", como bajar las listas de espera, seguir atrayendo inversiones o bajar impuestos.
El Gobierno considera que la ruptura podría "ayudar" a Feijóo
El Gobierno reconocía este jueves que la ruptura del PP con Vox podría beneficiar a su líder, Alberto Núñez Feijóo, "si se aleja de las políticas de ultraderecha", aunque dudó de que pueda "ganar espacio" electoral.
Así lo reconocieron fuentes del Ejecutivo que ven a Vox "más oficialista" estos días en cuanto a discurso y lo relacionaron con "la competencia", el partido de Alvise Pérez, que restó votos a la formación las últimas elecciones.
"Les conviene escenificar esta ruptura", añadieron y "más aún" si hubiera repetición electoral en Cataluña.