En el momento en que el féretro de Franco era introducido en el coche fúnebre tras ser exhumado de la basílica donde ha estado enterrado casi 44 años, se ha podido escuchar con claridad un "Viva España, viva Franco".
Fuentes del Gobierno han recordado que dentro de la basílica, la familia no ha podido colocar ni exhibir ninguna bandera. De hecho, una bandera preconstitucional plegada que llevaba Francis Franco le ha sido retirada en la puerta y devuelta a uno de los vehículos que transportaban a la familia.
Fuera de la basílica tampoco había permiso para exhibir o colocar banderas o símbolos que exaltesen la dictadura, en aplicación de la ley de Memoria Histórica.
El féretro lucía una corona de laurel con lazos del color de la bandera española, sin escudo alguno, así como un pendón, aportado por un familiar, con el emblema de la Jefatura del Estado empleado por el dictador.
No obstante, las fuentes del Ejecutivo reconocen que si las autoridades estimasen que se ha incumplido por cualquier otra circunstancia la ley, "podrían abrir el correspondiente expediente
sancionador".