Isabel Díaz Ayuso viajó hasta Miami para recibir la llave de la ciudad y en su visita vio a una trabajadora cubana en un encuentro que se ha hecho viral y ha circulado por las redes sociales.
"¿Ya comiste?", le empieza preguntando la trabajadora a la presidenta de la Comunidad de Madrid, haciendo referencia a la frase de Pedro Sánchez en su comparecencia tras el Comité Ejecutivo en el PSOE por la dimisión de Santos Cerdán. "No he comido y mira la hora que es", responde Ayuso entre risas.
La trabajadora sigue comentando con Ayuso que la sigue desde Miami y que lleva la política de España "al kilo". "¿Cuándo vamos a salir de Pedro Sánchez?", se pregunta la trabajadora, a la que Ayuso contesta: "En eso estamos".
"Por el comunismo estoy yo aquí. Llegué aquí a los 54 años, empezando de cero y huyendo del comunismo", zanja la trabajadora, que da la bienvenida a todo el equipo de Ayuso.
Ayuso recibe la llave de la ciudad de Miami
La presidenta madrileña recibió este lunes la llave de la ciudad de Miami, donde reiteró su rechazo a "las imposiciones y la intolerancia a manos de administraciones, gobiernos y políticas tiranas" que "sólo empobrecen, dividen y aniquilan a la persona".
Unas palabras que la presidenta madrileña, según ha trasladado la Comunidad de Madrid en un comunicado, comparte con el alcalde de Miami, Francis Suárez, a quien agradeció durante su viaje institucional el "inmenso honor" que supone esta distinción.
Así, Ayuso recibió la condecoración en reconocimiento a "su destacado servicio público" y "compromiso con los valores democráticos", además de como "señal de respeto, gratitud y deseo de construir una relación duradera de esta ciudad del Estado de Florida con la región madrileña".
"En Miami, como en Madrid, tenemos la inmensa fortuna de contar con personas que nos han acogido con los brazos abiertos", enfatizó, elogiando a todas aquellas que vienen "no solamente a trabajar, sino a aportar" y que "en unos casos huían del comunismo y, en otros como España, del nacionalismo".
A su juicio, esas personas a lo largo de su vida, con la experiencia y "viéndose forzadas a tener que dejarlo todo atrás" cuando vienen a vivir a Miami o a Madrid, lo hacen "con ganas de trabajar, prosperar, tener empresas, propiedades y sus proyectos vitales".
"No son extranjeros, ni turistas, ni inmigrantes", constató la presidenta madrileña, que calificó este hecho como algo "precioso" por saber que cuando algo va mal hay "otro lugar donde empezar desde cero".
"Somos 600 millones de personas que vemos la vida de una manera muy parecida, y en este nuevo orden mundial se nos tiene que escuchar más, porque afrontamos la vida de una manera mucho más humana, popular y alegre que otras comunidades", concluyó.