Susana Díaz presentará este lunes en el debate de investidura el programa anticorrupción más potente que se ha conocido en España, o así lo asegura la presidenta en funciones, que busca afianzar el apoyo de Ciudadanos y atraer a Podemos para garantizarse un nuevo mandato al frente de la Junta andaluza.
Díaz propondrá la responsabilidad subsidiaria de los partidos que se beneficien de casos de corrupción, el veto a los imputados para ocupar cargos públicos o la fiscalización de las cuentas de las formaciones políticas; su particular guiño a Ciudadanos."Vamos a llegar al límite de la transparencia", asegura.
Para captar a Podemos prepara medidas contra los desahucios, incentivos a los bancos que negocien y nuevas normativas sobre préstamos hipotecarios.
El PSOE ya sabe que la oposición votará en contra de la investidura de Díaz mañana en la primera votación.
En la segunda, el jueves, les bastaría con la abstención de Ciudadanos y Podemos para volver a gobernar. Así retaba la presidenta en funciones al PP, que defenderá su propio programa de gobierno, y a Podemos: "Van a tener que explicar algunos si votan a aquellos que recurrieron la ley de la función social de la vivienda con aquellos otros que dicen que quieren parar los desahucios. Van a tener que explicarlo si votan juntos".
Arenas aseguró que "el Partido Popular es la alternativa de gobierno al PSOE. Nos presentamos para sustituir al PSOE. Nuestra obligación es defender el programa alternativo al PSOE en el Parlamento andaluz".
El PP sólo se plantearía su abstención si esta fuera necesaria para evitar la repetición de las elecciones.