En una entrevista en Espejo Público

Rodríguez Ibarra, sobre el pacto con Bildu: "Preferiría que el PSOE prescindiera de su ala extremista"

El expresidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha aclarado que cuando los militantes socialistas hablan sobre el pacto con Bildu, no están atacando al secretario general, Pedro Sánchez, sino opinando, y que preferiría que el PSOE prescindiera de su "ala más extremista" y no distorsionara su imagen con compañías sospechosas.

ondacero.es

Madrid | 17.11.2020 10:59

El expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra
El expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra | laSexta.com

El expresidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha opinado sobre el pacto del PSOE con Bildu tras el apoyo de la formación liderada por Arnaldo Otegi a los Presupuestos Generales del Estado. El acuerdo ha originado enfado entre los barones socialistas y una lluvia de críticas entre muchos de sus militantes, a lo que el presidente Pedro Sánchez ha respondido reprochando que se haya hecho público ese malestar antes de trasladárselo a él en privado.

Asegura que "la democracia tiene que ser generosa, pero no idiota"

Rodríguez Ibarra ha querido aclarar, en una entrevista en Espejo Público de Antena 3, que cuando los militantes socialistas hablan, no están atacando al secretario general de la formación, sino opinando y ha espetado que "nadie tiene el monopolio de la opinión".

Sobre el pacto con Bildu, el expresidente ha asegurado que el PSOE no tiene nada en común con esa formación, "ni en el plano moral, ni estratégico, ni político, ni en el modelo de sociedad", por lo tanto, ha considerado "muy difícil" que se pueda pactar con ellos: "Pero es que además, se llega a pactos rápidos con los herederos de ETA, es decir, con aquellos que a lo mejor no mataban, pero decían 'ETA, mátalos' porque había en el País Vasco dos tipos de terroristas: el que daba el tiro y el que decía a ese hay que darle el tiro".

También ha comentado las declaraciones del expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en las que mostraba su apoyo al pacto con Bildu justificándolo en que la democracia tenía que ser "generosa". En opinión de Rodríguez Ibarra, la democracia sí tiene que ser generosa, "pero no idiota" y "habrá que pedir a Bildu lo mismo que se le pide a Vox, los dos tienen que hacer un largo recorrido para que sean creíbles".

Considera que Podemos está llevando al PSOE a una lucha de izquierdas contra derechas

Rodríguez Ibarra también ha dicho que preferiría que el PSOE prescindiera de su ala más extremista y no distorsionara su imagen con compañías sospechosas, no sólo por el pacto con Bildu, sino por el que tiene con Podemos, que, a su entender, está intentando llevar a los socialistas a una lucha de izquierdas contra derechas.

En este sentido, ha especificado que le gustaría que el Gobierno no estuviera solo, sino en compañía de aquellos que están dispuestos a mantener el sistema constitucional y quitar la amenaza que significa la situación tan complicada que vivimos actualmente con la pandemia del coronavirus.

Política de dispersión de presos de ETA

El expresidente de la Junta de Extremadura también se ha referido a la política de dispersión de presos etarras, que se hizo "no para fastidiar a las familias", sino para que entre ellos "no se retroalimentaran": "La política de dispersión de presos etarras fue una política que decidió el Gobierno socialista siendo el difunto Enrique Mújica ministro de Justicia. Tenía un sentido. Cuando la banda estaba plenamente operativa y estaban todos juntos, se retroalimentaban y planificaban. Entonces decidimos que lo mejor era dispersarlos, no para fastidiar a las familias, ni para que hicieran mil kilómetros cada vez que tuvieran que ir a ver a sus hijos, padres o hermanos, sino para que no estuvieran juntos y no se retroalimentaran".

Y ha considerado que actualmente, en un marco en el que ya ETA ha terminado, no tiene "mucho sentido" seguir manteniendo esa dispersión: "ETA ha terminado, la democracia ha vencido a ETA. Por tanto, ya no tiene mucho sentido, seguir con una política de sufrimiento no para el preso sino para las familias. Ya han renunciado a la lucha armada, ya pueden estar cerca de sus familias. Bueno, cada vez que se acerca un preso al País Vasco, yo me felicito porque significa la victoria de la democracia".