Priti Patel, la ministra británica de Interior, ha firmado este viernes la orden para extraditar a Julian Assange, el fundador de WikiLeaks, a Estados Unidos, tal y como ha informado el Ministerio de Interior. El país norteamericano había solicitado su extradición para juzgarlo por delitos de espionaje por la filtración de miles de documentos secretos.
La extradición ya había sido aprobada por los jueces del Tribunal de Apelación de Londres el pasado 20 de abril, que emitió una orden de entrega del periodista australiano a EEUU para ser considerada por el Gobierno del Reino Unido.
El Ministerio reconoce que "los tribunales de Reino Unido no han determinado que fuese represivo, injusto o un abuso procedimiental extraditar a Assange", por lo que han tenido que dar el visto bueno al proceso.
Esta decisión se ha llevado a cabo a pesar de que Assange ha tratado que los tribunales británicos impidan su extradición, bajo el argumento de su delicada salud y de la dura condena que le puede ser impuesta.
Un día negro para la libertad de prensa y la democracia británica
Por su parte, desde Wikileaks han explicado que esta noticia marca "un día negro para la libertad de prensa y la democracia británica". Además, han confirmado que Assange presentará un recurso de apelación contra esta decisión, algo que previsiblemente alargará el proceso.
Asimismo, la organización ha matizado que Julian Assange se enfrenta a una posible pena de 175 años de prisión cuando sea juzgado en Estados Unidos.
