El Ministerio de Trabajo y Economía Social y el Ministerio de Cultura han presentado el Real Decreto con rango de reglamento que regula el trabajo de menores en redes sociales, limita la Inteligencia Artificial (IA) -que no podrá autorizar el trabajo de los creadores sin su autorización- y obliga a incluir la figura del coordinador de intimidad en el sector artístico.
Yolanda Díaz y Ernest Urtasun han presentado esta propuesta, que regula la relación laboral de artistas, técnicas y auxiliares en el ámbito de las artes escénicas, audiovisuales y musicales. Es una norma que entra en consulta pública en un plazo de 30 días y "que se abrirá pronto" antes de pasar por el Consejo de Ministros y que busca actualizar el Real Decreto 1435/85, según fuentes ministeriales.
Qué es un coordinador de intimidad
La figura del coordinador de intimidad ha surgido en los últimos años a raíz del movimiento 'Me Too': es una persona que se encarga de asegurarse de que todos los actores y actrices estén cómodos con lo que pide el director y lo que pone en el guion. Es decir, una escena no se rodará si alguno de los implicados no está conforme.
Esta figura también deberá aportar elementos de veracidad a la escena y su trabajo no se centrará solo en escenas sexuales, también "a la exposición del cuerpo ante la cámara, la intimidad y la vulnerabilidad", así como si participan adolescentes o niños. El objetivo es crear un espacio seguro en el que todas las personas que participen en la escena se sientan cómodas y puedan expresarse con libertad si no están de acuerdo con algo.
En 2014 apareció la guía de bases prácticas para escenas íntimas y en 2015 se aprobó la figura de coordinadora de intimidad en Canadá. La plataforma HBO la emplea desde 2018 y en España se aplicó en 2021 con la serie de Apple TV 'Now and then', que se rodó parcialmente en nuestro país. También se utilizó en la serie de Daniel Sánchez Arévalo para Netflix, 'Las de la última fila'.
Llega muy tarde, pero llega, por fin
"Esto va a ser obligatorio por ley, no va a depender de la buena voluntad de nadie. Durante muchos años, las actrices han tenido que grabar escenas sexuales sin que nadie garantizara su consentimiento y a veces en condiciones muy inadecuadas en rodajes con presión y ahora por fin llega esta figura" ha señalado la ministra.
Asimismo, en palabras de Díaz, esta persona "va a proteger límites y consentimiento" y va a velar por la "salud física y emocional de la persona que actúa. No va a depender de la buena voluntad de nadie". "Sé que este estatuto llega muy tarde", ha reconocido, "pero llega, por fin".

