El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha valorado la "exquisita" labor desempeñada por el Rey en sus consultas con los partidos y ha agradecido la "confianza" depositada en él y en su partido para intentar formar gobierno. "El grupo socialista y yo vamos a asumir esa responsabilidad de intentar formar Gobierno", ha dicho Sánchez en una rueda de prensa en el Congreso tras recibir el encargo de Felipe VI. Además, ha denunciado "la espantada" del presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, por renunciar a la investidura, que él asume en un intento de formar un Gobierno de regeneración con el PP en la "oposición".
Sánchez ha explicado que buscará apoyos "a la derecha a la izquierda", pero siempre poniendo las políticas por delante de "los sillones" o el reparto de cargos. "Antes de las alianzas vienen los proyectos, antes de los nombres vienen los programas, antes de con quién viene para qué", ha sostenido para indicar a continuación las cuatro prioridades a las que, a su juicio, se enfrenta España: la falta de oportunidades laborales, la desigualdad, la crisis de convivencia con Cataluña y la crisis de confianza de los ciudadanos en sus instituciones.
El líder socialista ha anunciado que a partir de este mismo miércoles se pondrá en contacto con todas las fuerzas políticas para impulsar la formación de un Gobierno de cambio y progresista. "El cambio debe ser de la mayoría de los conciudadanos o no será", ha dicho. Ha asegurado que hablará con todas las fuerzas políticas de las medidas que son necesarias poner en marcha y que todos los ciudadanos tienen que tener cabida en ese proyecto de cambio, independientemente de su edad, su ideología o de lo que hayan votado.
Respecto a Cataluña, ha asegurado que "el Partido Socialista defenderá siempre la integridad de España" pero ha añadido que "con la ley no basta, hace falta política". En este sentido, ha afirmado que entre sus prioridades está "reformar la Constitución", aunque ha asegurado que no lo hará sin el apoyo del PP y que buscará el "consenso de todos" en este punto. En su comparecencia, Sánchez ha dicho que "hay que poner encima de la mesa soluciones basadas en el diálogo" y ha recordado que tiene una "propuesta clara", que es "avanzar en un Estado federal que garantice la unidad de una España diversa".
El líder socialista ha insistido en que ahora que la convivencia está "puesta en cuestión por el secesionismo y el independentismo" el PSOE defenderá siempre la integridad de España y el respeto a la Carta Magna. Pero ha subrayado que hay que buscar una solución, ha apostado por la reforma que defiende el PSOE y ha señalado que dicha solución debe lograrse "con el mayor consenso posible de todos y sin exclusión". Y en ese consenso ha asegurado que quiere que esté el PP, al que ha pedido "lealtad" en el caso de que pase a la oposición. Ante el debate catalán es necesario, ha insistido el líder socialista, un "nuevo entendimiento" que permita reforzar la convivencia como españoles y europeos.
Sánchez ha dejado claro que él va "en serio" en su disposición a formar Gobierno porque los españoles "se merecen y necesitan" un Ejecutivo. "Tenemos que pensar en el bien común", ha recalcado. Y para llevar a cabo esa tarea, ha dicho que al menos necesitará un mes para poder hablar con todas las fuerzas y tratar de alcanzar un acuerdo.