Las pintadas en más de una docena de sedes del PNV y varias del PSE-EE y Podemos se han repetido desde la pasada semana dentro de una campaña iniciada por el Movimiento Pro Amnistía, disidente de la izquierda abertzale, que incluyó ayer una herriko taberna del casco viejo de Bilbao.
El miércoles los radicales arrojaron pintura y octavillas el portal de la casa de la secretaria general del PSE-EE, Idoia Mendia, y su marido, el teniente de alcalde de Bilbao, Alfonso Gil.
El ataque se produce 24 horas después de otro similar perpetrado contra dos sedes y una oficina electoral del PNV en Durango y Abadiño y una sede de Podemos en esta última localidad vizcaína han sido objeto de nuevas pintadas en apoyo al preso expulsado de ETA Patxi Ruiz, en huelga de hambre, y en demanda de amnistía.
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