LA BRÚJULA

Ketty Garat: "Ábalos tenía un almacén de billetes y de señoritas que colocaba en empresas públicas"

La periodista de The Objective describió en La Brújula el alcance del caso Ábalos, asegurando que las pruebas de corrupción son "abundantes" y "obscenas", y que incluyen sobornos, favores sexuales y blanqueo de dinero.

ondacero.es

Madrid |

Ketty Garat: "Ábalos tenía un almacén de billetes y de señoritas que colocaba en empresas públicas"

La colaboradora de The Objective y de La Brújula con Rafa Latorre, Ketty Garat, realizó un duro análisis del llamado caso Ábalos en el programa de Onda Cero que dirige Rafa Latorre. Sus palabras generaron impacto inmediato al ir más allá del relato conocido sobre la supuesta caja B del exministro socialista, apuntando a una red sistemática de corrupción, tráfico de influencias y conductas personales "gravemente obscenas".

Un "almacén de billetes" y un "almacén de señoritas"

Durante la tertulia, Garat calificó de "increíble" el volumen de pruebas que el juez del Supremo Leopoldo Puente acumula contra José Luis Ábalos. Según relató, "cada vez son más las evidencias que se acumulan" y aseguró que el exministro "no solo tenía un almacén B de dinero en efectivo, sino también un almacén de señoritas que iba utilizando de tres en tres para sus encuentros sexuales".

En su intervención, la periodista afirmó que algunas de esas mujeres fueron colocadas por Ábalos "en empresas públicas con dinero público" y que incluso "las llevaba en viajes oficiales".

Aseguró además que existen "bienes patrimoniales vinculados a pagos por gestiones de licencias o alquileres ficticios para blanquear dinero", citando el piso de la Castellana firmado con el empresario Aldama como un caso paradigmático.

"Una obscenidad y una abundancia"

Garat sostuvo que el conjunto de pruebas documentales y material intervenido por la Guardia Civil es de tal magnitud que llevó al magistrado a abrir una pieza separada: "Si no la abría, se jubilaba y el caso aún seguiría engordando", ironizó.

Según explicó, la Unidad Central Operativa (UCO) lleva desde junio analizando dispositivos electrónicos relacionados con Ábalos y su entorno, y ya cuenta con más de 500 agentes asignados a la causa.

La periodista definió la situación como "de tal obscenidad y abundancia que desborda cualquier precedente judicial reciente".