|||hace cinco meses acudió voluntariamente a la comisión de Asuntos Institucionales, tendrá que volver a dar explicaciones sobre el origen de su fortuna oculta, ahora con el peso de su condición de imputado, ante la comisión sobre fraude y corrupción que el Parlament creó expresamente a raíz de la sacudida que su carta de confesión provocó en julio pasado en Cataluña.
La presencia de Pujol, que está citado junto a su esposa Marta Ferrusola y su primogénito, es esta vez obligatoria por tratarse de una comisión de investigación, pero la oposición teme que su hijo Jordi -imputado hace apenas días como gestor de la fortuna oculta- burle la comparecencia si acredita que reside fuera de Cataluña. En todo caso, fuentes parlamentarias creen que tanto Marta Ferrusola como Jordi Pujol Ferrusola podrían limitar su comparecencia a la lectura de un texto.
El expresident por su parte deberá dar cuenta del origen de los fondos que durante más de 30 años su familia ocultó en el extranjero, esta vez sin temor a adelantar ante los diputados las explicaciones que debería reservarse para la juez: a diferencia de la comparecencia del 26 de septiembre pasado, esta se produce un mes después de que Pujol se sometiera al exhaustivo interrogatorio de la instructora.
Durante cerca de dos horas, la declaración de Pujol como imputado apenas despejó las incógnitas que había suscitado su confesión; como |||investiga si cobró por asesorar e intermediar en obras públicas dependientes del ejecutivo catalán.