En declaraciones a los medios tras la ofrenda del Govern ante el monumento de Rafael Casanova, ha confiado en que la manifestación independentista de esta tarde en Barcelona será multitudinaria, cívica y pacífica y se demostrará que en Cataluña hay al menos dos millones de personas "determinadas a ejercer el derecho a la autodeterminación".
Preguntada por la simbología independentista en las calles, ha defendido que Cataluña es un modelo de convivencia y que sus calles no tienen que ser neutrales sino "plurales".