"Sería una desgracia para Susana y para mí que yo me pronunciara sobre eso; hasta ahora, que yo recuerde, ningún candidato al que he apoyado ha ganado", ha ironizado González, al ser preguntado durante un coloquio en el Foro Joly de Sevilla si cree que la presidenta andaluza reúne las condiciones para ser la nueva secretaria general del PSOE.
A la conferencia-coloquio ha asistido la presidenta de la Junta y numerosos dirigentes políticos y cargos institucionales, así como los expresidentes andaluces, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, quienes han compartido mesa con Susana Díaz.
Preguntado durante el coloquio si considera que Pedro Sánchez ha sido el "mayor error" de la historia del PSOE, González ha recordado que su partido tiene 130 años de historia y "ha habido de todo", aunque ha señalado: "Sin cultura de partido ha intentado hacerlo lo mejor que sabía, pero probablemente no sabía".
Sobre la fecha del congreso del PSOE, ha dicho que no cree que deba celebrarse "inmediatamente para que se produzca un congreso en descomposición", ni tampoco a "calendas griegas" como quizá -ha indicado- pretenden algunos "para saber si la breva cae cuando esté madura".
"Hay que articular un debate para saber si estamos en condiciones de responder a las prioridades del país, pero eso se puede hacer en tres, cuatro o cinco meses", ha opinado González, que ha llamado a los que "están al mando" a que se "pongan las pilas".
El expresidente del Gobierno, que al inicio de la conferencia avisó de que no tenía intención de responder a cuestiones "de actualidad", ha acabado por contestar al final del coloquio sobre asuntos relacionados con la crisis de su partido, incluida algunas de las actuaciones y declaraciones del exsecretario general Pedro Sánchez.
"No vi la entrevista, sino el eco de la entrevista, y si dijo eso (las supuestas presiones del Ibex 35) es que, al menos en ese momento, desvariaba", ha sentenciado.
Porque "a mí nadie me dice lo que tengo que hacer, ni en el Ibex, ni siquiera en mi partido ni en el gobierno; soy independiente, si alguien cree que puede torcer mi criterio por no sé qué intereses, se equivoca y, si además lo cree el exsecretario de mi partido, me entristece", ha confesado.
Sobre si el PSOE debe apoyar los presupuestos para el 2017, ha apuntado que no se puede decir que se va a respaldar lo que no se conoce aunque sabe que "difícilmente" serán "aceptables", tras lo que ha tildado de "tontería" que alguien piense que abstenerse en la investidura "te obligue a abstenerte para el resto de tu vida".
"Yo defendí la abstención a cambio de nada, que es el precio más alto para ser libre", ha apostillado, tras lo que ha reclamado al Gobierno que no haga recortes en el gasto social.
"Yo querría que hubiera un incremento, no por capricho, sino porque los paganos de la desigualdad tienen la tentación de mandarnos a paseo para votar opciones que sólo después de probarlas saben que son peores", ha asegurado antes de subrayar que eso es lo que les está pasando a los griegos y venezolanos.
Tras definirse como "el único referente político que queda de la mejor operación política de la historia de la democracia", el expresidente del Gobierno ha dicho en otro momento de su intervención que a los socialdemócratas les "joden" los autoritarismos de izquierdas y de derecha.
Ha defendido que España necesita un nuevo pacto social para el siglo XXI, para lo cual "lo primero es decirle la verdad a la gente, decir cuánto nos va a costar el sistema de pensiones".
Interpelado sobre si es partidario de que las pensiones se financien vía impuestos, ha dicho: "No soy partidario, es que es inevitable", tras lo que ha señalado que tiene que producirse un "compromiso previo" para acordar "cuánto se necesita para educación, pasa sanidad, para las pensiones y para pagar la deuda".