La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha respondido así a la decisión de Puigdemont de enviar una carta al comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramopoulos, en la que le informa de que la Generalitat trabaja para poder acoger a 4.500 refugiados en Cataluña.
Puigdemont añade que el interlocutor en este asunto es el "Minister" -traducción que utiliza oficialmente la Generalitat para referirse a los consellers- de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia, Raül Romeva.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha presidido hoy, Sáenz de Santamaría ha recalcado que el problema de los refugiados es "muy difícil" y requiere unidad como la que se plasmó esta semana en la Comisión Mixta para la UE en la que todos los grupos parlamentarios suscribieron un documento sobre la posición que defendería España ante sus socios europeos.
Hoy, ha recordado la vicepresidenta, están reunidos en Bruselas 28 Estados para intentar buscar una solución y "Puigdemont decide que él" tiene "la solución al problema, y va sólo y sin consensuarlo con nadie"
"Y Puigdemont decide que él", que una comunidad autónoma "de las que llaman regiones en la UE" tiene "la solución al problema y va sólo, unilateralmente y sin consensuarlo con nadie a plantearles la solución".
"A lo mejor el señor Puigdemont también tiene que pasar por la Comisión Mixta para la UE del Congreso para que le digan la posición de España en este punto", ha añadido la vicepresidenta en tono enérgico.
Fuentes del Ejecutivo han asegurado posteriormente que se analizará si el contenido de la carta de Puigdemont a la UE afecta a la suspensión decretada por el Tribunal Constitucional de las funciones de la consellería de Exteriores que dirige Romeva, ahora llamada Departamento de Asuntos y Relaciones Institucionales y Exteriores y Transparencia.