Una hora ha durado la entrevista, en la que también ha participado el secretario general del grupo socialista, Rafael Simancas, tras la cual los dos parlamentarios independentistas han ratificado en rueda de prensa que "no hay posibilidad" de que cambien su voto negativo a la investidura por una abstención.
Y ello, según ha concretado Botrán, por las discrepancias "de fondo" que la CUP mantiene con el PSOE, derivadas de su exigencia del reconocimiento del llamado "derecho de autodeterminación" para Cataluña mediante en un referéndum como el que celebró Escocia en 2014.
De esta manera, han explicado, se permitiría a los catalanes dar una "solución" al "conflicto" catalán, que consideran un "conflicto de Estado".
En su reunión con Lastra y Simancas, la última de la jornada dentro de los contactos del grupo socialista con los partidos con representación parlamentaria, les han advertido además de que "la represión no es la solución", en palabras de Botrán, para resolver ese "conflicto" con Cataluña y "va a complicar más las cosas".
En concreto, han sacado a colación el caso "flagrantemente injusto" de los nueve miembros de los CDR procesados por la Audiencia Nacional y encarcelados desde hace tres meses en un régimen penitenciario que consideran muy "duro".
Mireia Bohí se ha referido además a la "preocupación" de la CUP por la "normalización" de la presencia en el Parlamento de los diputados de Vox y ha asegurado que han recordado al PSOE que cuando hay presencia de "extrema derecha" lo que hay que hacer es "combatirla".
Además, sobre la posibilidad de que la CUP y Vox coincidan en su voto negativo a la investidura de Sánchez, el diputado Botrán ha afirmado que "nadie va a ser tan simplista" de "alinear dos formaciones porque coincidan en el sentido de su voto" cuando han llegado a esta decisión "por caminos distintos".
Y ha añadido que la mejor manera de "terminar con el ascenso de la extrema derecha" es celebrar un referéndum "libre, sin represión" sobre la autodeterminación de Cataluña.