El pleno del Congreso ha admitido a trámite este martes una nueva regulación de la actividad de los periodistas parlamentarios con el apoyo del PSOE y sus socios, que denuncian la presencia de "agitadores ultra" y "pseudoperiodistas, con el rechazo del PP y Vox, que ven la iniciativa contraria a la libertad de información.
La iniciativa es una proposición de ley presentada por el PSOE y sus socios de investidura de Sumar, PNV, Bildu, ERC, Junts y grupo mixto para reformar el reglamento del Congreso e introducir una nueva regulación de la actividad periodística, así como la ampliación del voto telemático de los diputados a más casos.
Con su admisión a trámite, el pleno ha dado luz verde para que esta propuesta siga dando pasos en el Congreso hasta su votación final, en la que será necesaria una mayoría absoluta para que salga adelante.
En qué consiste la medida
En concreto, la reforma plantea que la Mesa del Congreso regule el procedimiento para conceder y renovar acreditaciones a los medios de comunicación teniendo en cuenta criterios como el respeto al "derecho a la información veraz y el buen funcionamiento de la Cámara", tras varios episodios de "intimidación" y "faltas de respeto" por parte de personas acreditadas.
Además, plantea hasta 17 tipos de infracciones por faltas de respeto o por incumplimiento de las reglas de cortesía parlamentaria en el Congreso por parte de las personas acreditadas como prensa, con la posibilidad de suspender temporalmente la credencial o incluso retirarla del todo en los casos más graves.
Durante el debate en el pleno, el PSOE y muchos de sus socios han señalado que esta propuesta es fruto de las demandas de los propios profesionales de la información y han puesto el foco en el PP por no apoyarla.
Patxi López: es "basura y activismo ultra"
El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha denunciado la presencia de personas acreditadas en el Congreso como medios de comunicación, pero que, en su opinión, no hacen periodismo, sino "basura y activismo ultra" a través de "señalamientos, amenazas y acosos" hacia algunos políticos y periodistas.
Por su parte, el diputado de Sumar Francisco Sierra ha instado al PP a decidir si están con los "trumpistas" o con el Estado de derecho, mientras que la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, se ha preguntado qué haría el portavoz del PP, Miguel Tellado, si dijeran de él que es "franquista" o la portavoz de Vox, Pepa Millán, si la llamaran "hija de puta".
Control de la libertad de expresión e información
Los únicos que se han negado a la reforma han sido el PP y Vox, ya que consideran que el PSOE pretende controlar la libertad de expresión y de información. "No vamos a apoyar que la Mesa del Congreso, un órgano político, se convierta en un tribunal inquisidor que expida carnés de buenos y de malos periodistas. Y ustedes tampoco deberían, señorías, están sentando un precedente muy, muy peligroso", ha advertido la diputada del PP, Macarena Montesinos.
En la misma línea, el diputado de Vox Alberto Rodríguez cree que esta regulación de la actividad periodística es una "extralimitación" por parte del Congreso y asegura que su formación no va a participar en este "aquelarre" para intentar acallar a quienes denuncian las "miserias y vergüenzas" del Gobierno.

