ENTREVISTA EN ESPEJO PÚBLICO

Colau justifica que el plante al Rey fue "un gesto político para transmitir malestar y pedir un cambio en las relaciones

La alcaldesa de Barcelona ha explicado que no asistió al recibimiento del Rey porque quienes hacen política tienen que representar a los ciudadanos y "si hay sensación de malestar y dolor había que expresarlo", pero subraya que estuvo presente en el resto de actos y que tuvo la oportunidad de mantener una conversación privada con Felipe VI, a quien le transmitió su malestar.

ondacero.es

Madrid | 26.02.2018 13:42

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La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no participó en el recibimiento oficial al Rey Felipe durante con motivo del Mobile World Congress, que se celebra estos días en Barcelona.

Colau aseguró que este plantón se debió al papel que ejerció el monarca tras la celebración del referéndum del 1 de octubre, tal y como ha confirmado en una entrevista en Espejo Público, en la que aseguraba que "la situación que se vive en Cataluña en los últimos meses es muy complicada". "Es la más excepcional y anómala de los últimos 40 años, con el Gobierno intervenido, con líderes políticos y sociales en prisión preventiva desde hace meses", explica.

La alcaldesa recuerda que en Cataluña hubo "cargas policiales que causaron mucho dolor físico y emocional porque fue una intervención durísima contra personas pacíficas" y cree que después de eso "el Rey tuvo una intervención alineándose con las posiciones más duras", algo que asegura, "aquí no se entendió".

Esta era la primera visita del Rey a Cataluña desde el 1-O, además en unos días en los que se ha generado "mucha polémica por la libertad de expresión" tras la retirada de una obra sobre presos políticos en ARCO Madrid y la condena a un rapero por sus canciones.

Por ello, indica Colau, consideró oportuno "hacer un gesto político para transmitir ese malestar y pedir un cambio en las relaciones" aunque "respetando el contexto institucional y asistiendo a todos los actos".

Colau indica que con este gesto quiere recordar que Barcelona siempre ha apostado por el diálogo y por generar espacios de encuentro con las administraciones, pero considera que el besamanos era un momento oportuno para representar lo que piensan aquellos ciudadanos a los que ella representa.

La alcaldesa explica además que el discurso que ofreció Felipe VI dos días después de la celebración del referéndum, "causó dolor" y recuerda que "se echó de menos más empatía".

"Los que hacemos política tenemos que representar a los ciudadanos y si hay sensación de malestar y dolor había que expresarlo sin que eso afecte a las relaciones", asegura.

Ada Colau sí asistió a la cena posterior al recibimiento y pudo hablar con el Rey, que estaba junto a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. "Fue una conversación muy educada y cordial, creo que por ambas partes", explica la alcaldesa de Barcelona, que indica que le transmitió su malestar al monarca y que este fue educado en su respuesta, pero que no puede ofrecer más detalles porque se trató de una conversación privada.

"Esperábamos que el jefe de Estado estuviera por encima del conflicto y que hiciera una llamada a la conciliación y al diálogo y se alineó con las posiciones más duras y represivas tras unas cargas policiales que no se entendieron".

Preguntada sobre si cree que ese plante pone en riesgo el Mobile World Congress, Colau indica que este es un debate político y que desde la organización del Mobile tienen claro que "quieren que el congreso funcione y están convencidos de que Barcelona es la mejor ciudad para ello".

Colau recuerda además que las máximas compañías confirman que Barcelona es la mejor ciudad para este congreso y que se está trabajando para la capitalidad del 5G, que es el gran protagonista de esta edición.

Respecto a la cena institucional, a la que acudió el presidente del Parlament, Roger Torrent, en lugar del presidente de la Generalitat, como es costumbre, Colau explica que la situación fue incómoda y subraya que agradeció la presencia de Torrent porque "es una situación de excepcionalidad dura y difícil que aquí causa dolor" y considera que "hizo un esfuerzo institucional aunque la situación no fuese cómoda".