La jefa del Gobierno municipal se ha pronunciado así a su llegada a la plaza Mayor de Madrid para asistir a la tradicional misa en honor a la Virgen de la Almudena, patrona de la capital. Hasta ahora, Carmena no había expresado su posición sobre si el dictador podía ser inhumado en la catedral porque entendía que como alcaldesa no debe comentar cuestiones que no sean competencia del Ayuntamiento de Madrid.
Sin embargo, tras el anuncio esta semana de que el Gobierno enmendará la ley de memoria histórica para impedir que Franco vaya a La Almudena, la alcaldesa ha opinado que no podía haber lugares de exaltación: "Entiendo que nos debemos valer a los presupuestos de la ley de memoria". La regidora ha añadido que "la democracia es la única posible forma de gobernar" y que para reforzarla se creó la ley de memoria histórica.