Anticorrupción considera a Miguel Blesa y a Ildefonso Sánchez Barcoj responsables de un delito de administración desleal continuada por elevar el sueldo de nueve directivos de Caja Madrid en contra del acuerdo del Consejo de Administración. Multiplicaron por cuatro la subida del 4,5 que les correspondía.
En total, entre los incrementos de los sueldos fijos y los variables, los directivos recibieron 8,5 millones de euros de forma irregular entre 2008 y 2010. Según fuentes jurídicas en su escrito de calificación presentado en el Juzgado número 45 de Madrid, la Fiscalía pide que paguen por responsabilidad civil esos 8,5 millones de euros y tanto para Blesa como para Barcoj, cuatro años de prisión.