Alonso ha hecho esta reflexión en un acto organizado por su formación en San Sebastián con motivo de la celebración de los 40 años de democracia en España, que ha servido también para conmemorar el sexto aniversario del momento en el que "ETA asumió su derrota" y abandonó las armas.
El exministro ha estado acompañado en este evento por el vicesecretario de Política Social y Sectorial del Partido Popular, Javier Maroto, así como por el presidente de esta formación en Gipuzkoa, Borja Semper, además de por otros dirigentes populares vascos como Amaya Fernández, Iñaki Oyarzabal y Raquel González.
Durante su intervención, Alonso ha explicado que, al igual que en Cataluña, en Euskadi hay un "nacionalismo en el poder", en referencia al PNV; "fuerzas radicales que todavía están en la justificación de posiciones violentas", en alusión a EH Bildu; "populistas de Podemos que son la tercera fuerza", y la plataforma Gure Esku Dago, que ha definido como una "incipiente" Asamblea Nacional Vasca.
Una serie de "ingredientes" que, según ha descrito, de llegar a unirse llevarían "a la misma situación, a la misma posición, y por lo tanto al mismo desafío y al mismo peligro que se está sufriendo en Cataluña".
"No soy agorero, digo lo que he conocido en el pasado", ha insistido un Alonso que, tras recordar los años sufridos en Euskadi por el terrorismo de ETA, ha reiterado que "los ingredientes están puestos ahí" y, por lo tanto, la "responsabilidad" del PP "es impedir que se puedan mezclar nunca en el País Vasco".
A este respecto, ha reclamado al lehendakari, Iñigo Urkullu, que "sea responsable", que "aleje" cualquier "riesgo" de que en Euskadi pueda producirse una situación como la de Cataluña, y que "respalde a la democracia española" porque "es su obligación". "Esto es muy serio y llega el momento también de lanzar las advertencias en serio", ha sentenciado.
"Quiero gobernantes que hablen con claridad y digan las cosas de verdad. Y si en privado dicen que Puigdemont es un loco y que esto es un disparate, pues que también lo digan en público, porque hace falta decirlo en público", ha recalcado, tras lo que ha advertido de que el PP "no va a dar la mayoría de votos" en el Parlamento Vasco "para ninguna posición que nos pueda acercar a lo que está pasando en Cataluña".
Por su parte, Javier Maroto, ha alabado el "acierto" del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en las medidas adoptadas "con prudencia y contundencia" por su Gobierno respecto a Cataluña, trabajando "desde la unidad" y avalado "por una inmensa mayoría de los que defienden la democracia, la legalidad y el respeto a todas las reglas del Estado de derecho en España".
Maroto ha hecho una retrospectiva en la que ha apelado a los valores de la "unidad" y la "libertad" como receta para afrontar los momentos "difíciles", como el que actualmente se vive en Cataluña, y que en los últimos 40 años han permitido a nuestro país" superar con éxito la transición, participar en el proyecto de la Unión Europea, y "derrotar" al terrorismo.
El dirigente popular ha destacado además que "hoy todos los dirigentes relevantes en la UE han dado la razón a la actuación del Gobierno y de los grupos que le respaldan" con lo que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, "se ha quedado solo en Europa" y en la pretensión de "vulnerar una realidad construida desde el consenso" que ahora "se pretende destrozar desde las ideas secesionistas".
Maroto ha criticado también a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de la que ha dicho que tiene que "tener cuajo político" para afirmar que la aplicación del artículo 155 es el hecho "más terrible de los últimos 40 años", cuando "sólo hace dos meses un atentado acabó con la vida de 15 personas en las ramblas a quince metros de su oficina"
