La número 2 de lista de la CUP por Barcelona en las próximas elecciones autonómicas, Maria Sirvent, no ha concretado al término de la reunión del Consejo Político a qué partidos propondrán estos tres puntos de consenso y ha señalado que por ahora se han limitado a ponerlos "sobre la mesa".
El primero de estos puntos, ha explicado Sirvent, es "el compromiso ha hacer efectiva la república" catalana, en base a "los resultados del 1-0 y la proclamación del 27 de octubre".
El segundo es "exigir la liberación de los presos políticos" y "el control efectivo del territorio", que, ha dicho, "ha de ir precedido necesariamente de la huida o la retirada del Estado español y la Guardia Civil".
Y el tercero y último es "el impulso de un gran acuerdo de país para el proceso constituyente, para ampliar los derechos sociales y políticos y para la consecución de soberanías, soberanías para nuestro pueblo y soberanías contra la pobreza y la corrupción", ha explicado.
Sirvent ha denunciado que estas elecciones se van a celebrar con "un árbitro absolutamente parcial que busca resultados muy concretos" y que el objetivo de la formación anticapitalista tras estos comicios será "la implementación de una república" catalana.
Ha señalado también que la CUP representa "la fuerza frente a la represión", que es "la garantía del cambio", que detrás "sólo dejamos el 155 y la regresión en derechos y libertades", y que "no es el momento de claudicar".
En el exterior de la sede de la CUP en Barcelona se han vivido algunos momentos de tensión ya que, coincidiendo con esta reunión de su Consejo Político, una plataforma ultraderechista había convocado una manifestación en ese lugar bajo el lema "las calles ya no son vuestras".
Un cordón de los Mossos d'Esquadra ha separado a la cincuentena de manifestantes ultraderechistas que han participado en la misma de varios centenares de militantes y simpatizantes de la CUP que habían acudido al llamamiento de la formación a defender su sede.
Los miembros de ambos bandos se han intercambiado insultos pero el cordón policial establecido para separarlos ha hecho que no se registraran incidentes destacables.
La CUP denunció ayer que la Junta Electoral y el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) se hubieran "inhibido" ante su petición de prohibir esta concentración ultraderechista, ante lo cual pidió a la militancia 'cupera' que la protegiera.