Onda Cero ha tenido acceso al documento que el Gobierno ha enviado al Consejo Económico y Social y lo que queda claro, es que en años de bonanza las pensiones crecerían modestamente por encima del IPC. Pero en años malos, el golpe para los pensionistas sería más que duro.
En este documento, el ministerio hace un balance de cómo hubiera afectado a las pensiones si se hubiera aplicado entre 1997 y 2012 el índice de revalorización que el Gobierno propone. El resultado es que durante los primeros 14 años, los jubilados verían crecer en sus pensiones el IPC más de un 0.25%. En total, aumentaría su poder adquisitivo un 4.8%, pero en los dos últimos, en 2011 y 2012, sólo sumarían un 0,25% cada año, por lo que perderían un 5.3% de su renta, ya que el IPC se situó ambos ejercicios en el 2.9%. Es decir, en sólo dos años de recesión, los jubilados habrían perdido todo el poder adquisitivo ganado en los 14 años anteriores.
El informe también hace una proyección al futuro, sobre cómo afectaría a las cuentas de la Seguridad Social aplicar desde el año que viene el factor de sostenibilidad junto al de revalorización.
Se estima que las pérdidas del sistema se reducirían en 2014 y serían 800 millones de euros, ya que sobrepasarían los 5.000 millones de ahorro desde 2019 hasta el 2022. En total, más de 33.000 millones de euros.
El documento de 44 páginas, ya está en manos del Consejo económico y social. El CES tiene ahora diez días para dar su opinión. El Gobierno, con esta valoración y las aportaciones de los agentes sociales, enviará la propuesta definitiva de la reforma de las pensiones, al Congreso de los diputados a final de mes.