Traducido en números, y según el Banco de España, la deuda es de más de 961 mil quinientos millones de euros. Cerca de un billón y que es el triple que antes de que comenzara este lustro de crisis.
El ministro de Hacienda insiste en el compromiso del Gobierno de reducir la deuda y el déficit público hasta los niveles que marca Europa. Las deudas que están a punto de pasar a la historia, según Cristóbal Montoro, son las que mantiene la Administración con sus proveedores.
Dice el Montoro de Hacienda que con la última fase del plan de pago a proveedores, que arranca mañana y pagará deudas por valor de ocbo mil millones de euros, las administraciones públicas se pondrán prácticamente al día en el pago de sus facturas.
El ministro ha confiado en que "no se vuelvan a producir en España demoras semejantes en el pago a proveedores" gracias a leyes como la comercial y la de factura electrónica. "El uso abusivo de la deuda comercial, que ha ocurrido en años anteriores, ha sembrado dudas, incógnitas, incertidumbres en España que gracias a este sistema de pago a proveedores y al fondo de liquidez autonómica estamos solventando".
Montoro ha inaugurado hoy unas jornadas organizadas por la intervención general del Estado. Allí ha citado las palabras del que fuera ministro de Hacienda y premio Nobel José Echegaray, para dejar claro su mayor temor "al igual que el creyente tiene un santo temor a Dios, el ministro de Hacienda tiene santo temor al déficit".
Cristóbal Montoro ha insistido en que en un país donde el origen de los problemas está en la deuda externa "la salida de la crisis tiene que consistir en consistir el endeudamiento de las administraciones públicas", por lo tanto "debe seguir esa senda, ese objetivo, de reducción del déficit público" siempre teniendo en cuenta, dice el ministro, que este objetivo no debe profundizar la crisis económica
