La deuda pública aumentará del 70,2% al cierre de 2012 al 90,5% del PIB en 2013 por las nuevas necesidades financieras y la refinanciación de vencimientos, así como por el impacto de instrumentos como el Fondo de Pago a Proveedores o el crédito para la recapitalización de la banca.
Esta cifra es más de ocho puntos porcentuales superior a la previsión anterior del Gobierno, que apuntaba a una ratio de deuda sobre el PIB del 82,3% para el próximo año.
El Estado tiene previsto emitir el próximo año 207.173 millones de euros, lo que hará que el peso de la deuda del conjunto de las administraciones pase del 85,3 % del PIB en 2012 al 90,5 % en 2013.
Si se tiene en cuenta solo la administración central, el peso de la deuda será este año del 70,2 %, frente al 66,1 % de 2012, según figura en el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2013.
Detrás de esta fuerte subida se encuentra no solo las necesidades de endeudamiento por la crisis económica, sino también el préstamo europeo de 100.000 millones para recapitalizar la banca, así como la aportación de España al rescate de Grecia y Portugal, el programa de pago a proveedores, y el fondo para titulizar el déficit de tarifa eléctrica, el FADE.
En la nueva partida de presupuestos[[LINK:INTERNO|||||| la asignación a la Casa Real se ha reducido un 4%]].
