Ciencia

Qué es una llamarada solar: alertan de que así puede afectar a la Tierra

El Instituto Fedorov de Geofísica Aplicada en Moscú ha advertido de que se van a producir tres llamaradas en el Sol.

ondacero.es

Madrid | 20.07.2023 13:15

Qué es una llamarada solar: alertan de que así puede afectar a la Tierra
Qué es una llamarada solar: alertan de que así puede afectar a la Tierra | Pexels | Pixabay

La Tierra afronta la llegada de una llamarada solar, también conocida como explosión solar 'caníbal' y que podría acarrear una tormenta geomagnética. Así lo aseguran los expertos tras registrar una explosión en el extremo suroeste del Sol.

Qué es una llamarada solar

Una llamarada solar es una gran explosión en el Sol que sucede cuando la energía almacenada en campos magnéticos 'retorcidos' (generalmente sobre las manchas solares) se libera repentinamente.

En pocos minutos, calientan el material a muchos millones de grados y producen un estallido de radiación en todo el espectro electromagnético, que incluye desde ondas de radio hasta rayos X y rayos gamma. Así lo explican desde la Agencia Espacial Europea.

Cómo se clasifican las llamaradas solares

Los científicos clasifican las llamaradas solares según su brillo en las longitudes de onda de los rayos X. En National Geographic informan que existen tres categorías:

  • Las llamaradas de clase X son grandes: se trata de eventos importantes que pueden provocar apagones de radio en todo el mundo y tormentas de radiación de larga duración en la atmósfera superior.
  • Las llamaradas de clase M son de tamaño mediano y pueden causar breves apagones de radio que afectan sobre todo a las regiones polares de la Tierra.
  • Las llamaradas de clase C son pequeñas y tienen pocas consecuencias notables aquí en la Tierra.

Así puede afectar a la Tierra

Uno de los efectos principales de las llamaradas solares es la interferencia electromagnética. La radiación electromagnética liberada puede causar interferencias en las señales de comunicación, resultando en una mala calidad de llamada, pérdida de conectividad o incluso interrupción total de los servicios de telefonía móvil.

Las partículas cargadas pueden inducir corrientes eléctricas en los circuitos electrónicos de nuestros dispositivos. Estas corrientes pueden dañar los componentes internos, como los microchips, los transistores o los condensadores, provocando fallos y averías permanentes.