Este lunes, como cada 22 de diciembre, los medios de comunicación y las redes sociales se han llenado de imágenes de felicidad y celebración por los premios de la Lotería de Navidad, que se juega en todo el país. El 79.432 ha sido el número premiado con los cuatro millones de euros y ha cambiado la vida de mucha gente, al igual que otros muchos que han sido agraciados con el resto de premios.
Pero, ¿qué pasa con aquellos que se han quedado muy cerca de tener el número premiado? Es el caso de Eduardo López Moreno, dueño del bar La Caleyina del Fontán, en Oviedo, donde jugaban con el número 79.422. Por un solo número se han quedado sin premio.
"Se asimila, no es fácil", reconoce en Por Fin, donde cuenta también que en su caso no hubo momento de confusión porque él no estaba haciendo el concurso y su mujer le llamó para contarle "la mala suerte que habíamos tenido".
Aunque a él no le ocurrió, Eduardo sí que cuenta que hay gente que jugaba el número a la que sí le ha ocurrido. "Un chaval del mercado se puso a temblar cuando se lo dijeron, pero al final resultó que no (…) Hubo gente que pensaba que sí y al final pues no", explica en Por Fin.
El dueño del bar cuenta entre risas que la gente con la que se cruzaba le iba dando el pésame, aunque al menos no se irán con las manos vacías. "Nos toca la pedrea, que son 120 euros. Está bien, pero le falta algún cero de más", dice.
Eduardo se termina lamentando de esta curiosa situación porque "hubiese sido un bombazo para el barrio".
