El restaurante Círculo Mercantil se encuentra ubicado en un antiguo palacete del Madrid de principios de siglo XX, un lugar que acogió en su tiempo la sede del Círculo Mercantil e industrial de Madrid y que en la actualidad tenemos la suerte de conocer gran parte de la esencia del siglo pasado, gracias a la elegancia que mantiene en sus salones. Además de esta atmósfera tan agradable y poco común, sólo hay que dejarse llevar por el menú degustación que aúna el mejor producto de temporada con la cocina de vanguardia del chef Iván Sánchez, discípulo de Arzak y Berasategui. El recorrido gastronómico que proponen en el Círculo Mercantil se puede realizar a través de cuatro platos o de seis, y es terriblemente complicado quedarse con sólo un plato pero el Arroz meloso de jarrete de ternera blanca con alcachofas y las Vieiras a la plancha, puré de patata especial y panceta crujiente son dos imprescindibles.
Además de ser un lugar que los “arroceros” deberían anotar, otra de las grandes bazas de este lugar son los postres, una parte del menú en la que se aprecia el cuidado y la minuciosidad que requiere la preparación de dulces, como con la Sopa de mango y fruta de la pasión, menta y helado de mascarpone y el Soufflé de chocolate con helado de baileys. Y para poner un broche final a este “viaje en el tiempo” acompañado de alta cocina, en cada rincón del edificio se pueden ver diferentes instantáneas de las calles de Madrid a lo largo del primer tercio del siglo XX.