Partiendo de que es un conflicto que dura muchas décadas y cuya base está en la disputa de un territorio que los palestinos y la justicia internacional ven como ocupación y los israelíes como una cuestión de autodefensa, el profesor Haizan Amirah Fernández apunta que las hostilidades se desatan siempre cuando los cálculos políticos de unos chocan con los intereses de otros y que será difícil poner fin al conflicto de raiz porque los problemas de fondo no se resuelven.
El analista experto en Oriente Medio insiste en que para analizar el conflicto hay que tener en cuenta la percepción de ambas partes. Comenta que el último intento de EEUU de acercar posiciones no dio frutos porque el punto de partida no era el adecuado y ha vuelto a generar una sensación de frustación "cuando no hay resultados, lleva a una frustración que abona el terreno para volver a la violencia, al castigo, a la venganza, poniendo a los civiles como moneda de cambio".