El último de ellos, y con una película que aún no tiene fecha de estreno en España es Idris Elba, en el largometraje que podría valerle una nominación a los Óscar, Mandela: Long Walk to Freedom. Dirigida por el británico Justin Chadwick, y escrita por William Nicholson basándose en la biografía del propio Mandela, la cinta hace un recorrido de algo más de dos horas por la vida de la figura política sudafricana. A pesar de que ha sido acogida con tibieza en los festivales en los que se ha preestrenado, el devenir de los acontecimientos le ha asegurado a la productora un cierto éxito de taquilla.
En 2010 el encargado de llevar al mito a la pantalla fue David Harewood, al que recientemente hemos podido ver en Homeland como el director David Estes. En el film de la BBC titulado Mrs. Mandela, el presidente no es el foco principal de la película, sino su segunda mujer Winnie Madikizela-Mandela, interpretada por Sophie Okonedo. Si bien en las imágenes de la “juventud” de Mandela, Harewood puede que conserve la similitud física, el envejecimiento le convierte prácticamente en una caricatura del personaje real.
Un año antes el neoyorquino Clarke Peters fue el encargado de dar vida a Mandela, en el televisivo film de Channel 4 Endgame. La película, tal y como comentaron Carlos Alsina y su contertulios el pasado viernes, narra los últimos días del apartheid, centrándose en las conversaciones secretas entre Thabo Mbeki, del Congreso Nacional Africano, y el Primer Ministro P.W Botha. A pesar de que el papel de Peters es relativamente menos, llama la atención que dos actores presentes en The Wire, intepretasen, con una diferencia de cuatro años el mismo papel,a pesar de que entre ellos hay dos décadas de diferencia.
Por último, en 2007, y con bastante más notoriedad que las dos anteriores, se estrenó Adiós Bafana, que contaba la historia de James Gregory, el carcelero que durante veinte años se encargó de Nelson Mandela mientras éste estuvo en prisión, y de cómo este hecho cambió su vida. Del papel del mandatario surafricano se encargó Dennis Haysbert, intérprete californiano nacido en 1954 al que hemos podido ver en The Unit o 24, dando vida al Presidente David Palmer.
En las diversas entrevistas y reportajes que se pueden encontrar en la red al respecto de cada una de las películas y personajes, todos coinciden en valorar como un verdadero desafío el tener que ponerse en la piel de un hombre tan importante y tan relevante para la historia como Nelson Mandela. Con resultado desigual a la hora de valorar su calidad artística y su valor histórico, todas ellas sirven para confirmar la importancia que Mandela tuvo para su nación y para el mundo, y para preservar, ya sea mejor o peor, la importancia de su trabajo y la fortaleza de su espíritu.