Este lunes entra en vigor el Real Decreto de Registro de Viajeros. Norma de 2021, cuya moratoria ha terminado, y que supone un cambio radical en el control de las personas alojadas en hoteles, viviendas turísticas, campings o casas rurales, y contra la que eleva la voz el sector por varios motivos.
La Asociación de Hoteles de La Rioja analizaba ayer esta cuestión en su asamblea general. Su presidente, Demetrio Domínguez, decía en nuestros micrófonos que acababa de recibir una circular de la patronal hotelera avisando de un periodo de consultas. Consideran que estos cambios entorpecen el trabajo de los alojamientos, e incomodan a los viajeros, al requerirles datos que pueden vulnerar su derecho a la privacidad. A ello unen que la plataforma no funciona. En las casas rurales cuyos propietarios suelen ser una o dos personas, se multiplica la complicación de su labor. Joaquín Sanz, presidente de ASCARIOJA.
Tanto los hoteles como las casas rurales consideran que este año ha sido bueno para el turismo riojano, aunque aspiran a que se amplíen las estancias de los viajeros y que el gasto que realicen se incremente, en todos los aspectos. De cara al puente de la semana que viene y a la Navidad, las perspectivas de ocupación son buenas, entre un 80 y 90%.