La familia considera "repugnante" la última declaración de Almeida en el juicio en la que afirma estar arrepentido y pide perdón.
Los familiares consideran que en el juicio ha quedado muy acreditada la culpabilidad del acusado y que este no tiene nebulosa alguna, como afirmó el primer día.
"No tiene lagunas mentales; se acuerda de todo lo sucedido desde el día que nació", afirma Martín.
Por ello esperan que el tribunal le imponga las máximas penas: 15 años por la violación y prisión permanente revisable por el asesinato.
Martín afirma que no debe salir más de la cárcel: "como pueda, volverá a matar porque lo lleva en la sangre".